OBJETIVO, ESTRUCTURA Y
FORMACIÓN.
Para
construir un club, es necesario seguir estos 3 puntos; OBJETIVO, ESTRUCTURA Y FORMACIÓN. En primer lugar tenemos que
establecer el objetivo que queremos logar, este debe ser:
1.
Especifico; es
decir concreto.
2.
Medible, por
ejemplo; conseguir al final de temporada 25 jugador@s.
3.
Ajustable o
flexible; siguiendo con el ejemplo anterior, pueden ser unos jugador@s más o
menos.
4.
Realista; debemos
ser consecuentes con lo que nos propongamos.
5.
Tiempo;
establecer el tiempo necesario para conseguir dicho objetivo, dentro de una
realidad.
6.
Estrategia; como
lo conseguiremos.
Una
vez establecidas estas premisas, debemos crear la estructura necesaria para
conseguirlo, si pretendemos 25 jugador@s, debemos tener un entrenador@, quizás
ayudante y/o delegad@, lugar para entrenar, balones, etc. Todo ello en base a
una directiva dispuesta a trabajar para construir dicha estructura y
fundamentarlo en el rugby base. Pero además, se debe aplicar el mismo criterio,
establecer los 6 puntos planteados anteriormente. Todo ello, considerando que
dicha estructura evolucionara con el tiempo, obviamente, si se consiguen los
objetivos, se verán los resultados y con ello, cada día conseguiremos más
jugador@s en el club, se necesitarán más entrenador@s, balones, etc., y con
ello más ingresos.
Finalmente,
debemos fomentar la formación de los entrenador@s y con ello, los jugador@s. A
más entrenadores titulados, más jugador@s, fundamentalmente porque los
entrenamientos son mucho mejores. Hay que concienciar a los posibles aspirantes
a entrenador que deben obtener el título de entrenador@, siendo muy cuidadoso,
con aquellos que por ejemplo, una vez tienen el título nivel I, se creen que ya
no es necesario continuar con su formación, es un error, no tan solo uno puede seguir
sacándose el título de nivel II y III, sino que hoy en día hay cursos
específicos relacionados con la didáctica, metodología, psicología deportiva,
“clinics”, en fin, una gran gama de
cursos muy interesantes para aplicarlos en los entrenamientos del día a día. Se
podría decir, que la formación debe ser continua. Todo ello, se debe fomentar y
quizás podría de decir, exigir.
Una
vez establecido el OBJETIVO, ESTRUCTURA
Y FORMACIÓN y se han conseguido los resultados, debemos plantear otra vez
otro OBJETIVO. Sin ocurre, que no se
consigue lo que se pretendía, entonces nos será muy fácil analizar donde se ha
o se han producido los fallos, con ello se puede replantear el OBJETIVO.